MONS. OLIVERA | Señor, que, con abnegación, persistencia, sacrificio, humildad y profesionalismo, sigan demostrando de lo que es capaz el Ejército, con el solo afán de servir a la Nación, así lo pidió el Obispo Castrense y de las Fuerzas Federales de Seguridad al compartir la invocación religiosa en el 215° aniversario de la creación del Ejército Argentino. En la media mañana del jueves 29 de mayo, en la Plaza de Armas del CMN (Colegio Militar de la Nación) se desarrollaba el acto homenaje pen honor a la Fuerza.
El acto fue presidido por el Sr. Ministro de Defensa, Dr. Luis Petri, quien estuvo acompañado por Jefe del Estado Mayor Conjunto, Brigadier General Xavier Julián Isaac, el Jefe del Estado Mayor General del Ejército, Teniente general Carlos Alberto Presti, el Jefe del Estado Mayor General de la Armada, Almirante Carlos María Allievi, el Jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea Argentina, Brigadier Gustavo Javier Valverde, el Obispo Castrense y de las Fuerzas Federales de Seguridad, Mons. Santiago Olivera, el Capellán Mayor del Ejército Argentino, Padre Eduardo Castellanos, el Capellán del CMN, Padre Santiago García del Hoyo, efectivos e invitados. En la invocación, Mons. Santiago decía, “Señor, solemos y sabemos cantar: Cristo Jesús, en Ti la Patria espera. Pero sabemos y por este día grande agradecemos, que tu presencia será reflejada por los valientes hombres y mujeres del glorioso Ejército Argentino. Te damos gracias por el don de sus vidas y por sus familias, que los acompañan y contienen en esta singular vocación de servir a la Patria”.
Completando, el Obispo agregó, “te damos gracias porque abrazan una vocación de servicio que no tiene límite ni tiempo, porque abrazan su vocación con la convicción de “Servir hasta morir”, hasta entregar lo más preciado que la propia vida si fuera necesario, para defender y custodiar la Paz, para preservar la paz, para consolidar la paz. Concédeles, la luz de tu Espíritu, para que puedan realizar en plenitud el cumplimiento de la vocación militar, y que con su ejemplo contagien a los corazones tu mensaje de paz, de justicia y de amor”.
En otro párrafo, Mons. Olivera pedía al Señor, “que, con abnegación, persistencia, sacrificio, humildad y profesionalismo, sigan demostrando de lo que es capaz el Ejército, con el solo afán de servir a la Nación”. Finalizando, rezó, “que, por la intercesión de Nuestra Señora de la Merced, Patrona y Generala del Ejército Argentino, caminemos como peregrinos de la esperanza, con fe, ayudados con la certeza de tu verdad y la fuerza de tu Amor”.


A continuación, compartimos en forma completa la invocación religiosa de Mons. Santiago Olivera, Obispo Castrense de Argentina y de las Fuerzas Federales de Seguridad:
INVOCACIÓN RELIGIOSA 215º ANIVERSARIO DE LA CREACIÓN DEL GLORIOSO EJÉRCITO ARGENTINO
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén
Señor, solemos y sabemos cantar: Cristo Jesús, en Ti la Patria espera. Pero sabemos y por este día grande agradecemos, que tu presencia será reflejada por los valientes hombres y mujeres del glorioso Ejército Argentino. Ejército que nació con la Patria, Ejército que fue reconocido por la Primera Junta de Gobierno en 1810 por su servicio, entrega y trabajo de las tropas militares durante la Revolución de Mayo, por eso hoy celebramos un nuevo aniversario de su creación.
Te damos gracias por el don de sus vidas y por sus familias, que los acompañan y contienen en esta singular vocación de servir a la Patria. Vocación que supone esfuerzo, abnegación, lealtad, verdad, firmeza, honor y obediencia, subordinación y valor.
Te damos gracias porque abrazan una vocación de servicio que no tiene límite ni tiempo, porque abrazan su vocación con la convicción de “Servir hasta morir”, hasta entregar lo más preciado que la propia vida si fuera necesario, para defender y custodiar la Paz, para preservar la paz, para consolidar la paz.
Recordamos 215 años de vida, como toda realidad con luces y sombras, pero la verdad que tiene fuerza esplendorosa nos muestra y manifiesta las Glorias y honras de tantos hombres y mujeres que fieles.
Confiados te pedimos Señor:
Concédeles, la luz de tu Espíritu, para que puedan realizar en plenitud el cumplimiento de la vocación militar, y que con su ejemplo contagien a los corazones tu mensaje de paz, de justicia y de amor.
Que, con abnegación, persistencia, sacrificio, humildad y profesionalismo, sigan demostrando de lo que es capaz el Ejército, con el solo afán de servir a la Nación.
Rezamos y te encomendamos los hombres que han pasado por el Ejercito Argentino, también rezamos por aquellos que vendrán y mantendrán siempre encendido el fuego de la pasión que sabe de lo grande, del valor de la libertad y de la entrega por un bien mayor, que es vivir y defender las raíces comunes, nuestra historia, nuestros valores y nuestra fe.
Señor, escucha con bondad nuestras súplicas y bendice a todos los aquí presentes, a las Autoridades de Nuestra Nación, a su Presidente Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, y a todos los miembros del Glorioso Ejército Argentino que nos honra y al que honramos.
Que, por la intercesión de Nuestra Señora de la Merced, Patrona y Generala del Ejército Argentino, caminemos como peregrinos de la esperanza, con fe, ayudados con la certeza de tu verdad y la fuerza de tu Amor.
0 comentarios