Papa Francisco | La fe se recibe: con inocencia, con apertura de corazón, así lo dijo Su Santidad al compartir su Homilía en la Fiesta del Bautismo del Señor, durante la celebración Eucarística en la Capilla Sixtina. En la celebración presidida por Su Santidad Francisco, el Papa bautizó a algunos niños.

El Santo Padre decía, “(…) estamos aquí para bautizar, para dar el don de la fe a nuestros hijos. Ellos son los protagonistas, porque hoy nos darán también el testimonio de cómo se recibe la fe: con inocencia, con apertura de corazón”.

A continuación, compartimos en forma completa la Homilía de Su Santidad Francisco:

FIESTA DEL BAUTISMO DEL SEÑOR

CELEBRACIÓN DE LA SANTA MISA Y BAUTISMO DE ALGUNOS NIÑOS

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO

Capilla Sixtina

Domingo 7 de enero de 2024

Queridos hermanos y hermanas,

estamos aquí para bautizar, para dar el don de la fe a nuestros hijos. Y ellos son los protagonistas de esta ceremonia: pueden hablar, ir, gritar… Ellos mandan, porque es su fiesta: recibirán el don más hermoso, el don de la fe, el don del Señor.

Si lloran -de momento callan, pero basta con que uno dé la nota y empieza el concierto-, déjenlos llorar; si tienen hambre, amamántenlos tranquilamente aquí. Si tienen calor, quítenles la ropa, que a veces el calor hace daño.

Ellos son los protagonistas, porque hoy nos darán también el testimonio de cómo se recibe la fe: con inocencia, con apertura de corazón.

Y a ustedes, padres y padrinos, les deseo que vuestras vidas ayuden a estos niños, que les ayuden a crecer. Les deseo que los acompañen en su crecimiento, porque ésta es una manera de ayudar, para que la fe crezca en ellos. Muchas gracias por vuestro testimonio, por traerlos aquí para que reciban la fe.

Y ahora, continuemos con el rito del Bautismo.

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Palabras armadas antes de la Bendición Final

Antes de darles la bendición, les agradezco que hayan comenzado esta vida de sus hijos con el Bautismo. Y os encomiendo, que ellos conozcan la fecha del Bautismo, porque es la fecha del nacimiento. Y cada uno de nosotros también. Si les pregunto: «¿Cuál es la fecha de su nacimiento?», no sé si todos lo sabrán. Pero piensen bien: la fecha de nacimiento es como un cumpleaños, la fecha en la que recibí la gracia del Señor y me hice cristiano. Enseñen esto a los niños, para que lo celebren cada año.